Colgante de Ónix en forma de Lágrima con Cuerda Encerada
Este colgante de ónix, tallado en forma de lágrima, es un poderoso amuleto de protección y fortaleza interior. El ónix es una piedra asociada con la estabilidad emocional, el control personal y la capacidad de enfrentar los desafíos con serenidad y determinación.
Su forma de lágrima simboliza la transformación del miedo en fuerza y la canalización de la energía hacia el equilibrio. Cada pieza emite una vibración profunda y protectora que ayuda a disipar las energías negativas, fortalecer el aura y mantener la mente enfocada.
Montado en una cuerda encerada resistente y ajustable, este colgante es ideal para el uso diario o para acompañar rituales de limpieza, protección energética o meditación. Es un talismán que aporta firmeza, concentración y calma ante los cambios.








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